sábado, 16 de julio de 2011

Harry Potter Y La Última Horcrux De Mi Niñez

HOY fui a ver Harry Potter 7.2 (Las Reliquias de la Muerte: Final Part).
No acostumbro escribir sobre cine. (Pozole).
Pero el tema lo amerita.

Desde que tenía 10 años recién cumplidos, comencé a leer el primer libro de Harry Potter. Me lo regaló el que en ese entonces era jefe de mi papá, con la siguiente inscripción en el libro:
"Nov. 15, 1999. Dear Alfieri: Here is a book for your imagination. Tu amigo, Bernie."
De los pocos estadounidenses que tengo en consideración decente y buena estima, (aunque cuando su nietecito se quedó en mi casa por una semana ya lo queríamos aventar por la ventana porque el en ese entonces "pequeñín"sí es el típico gringo estereotípico 'me merezco el mundo y bush es mi idolo, y todos los demás nacos que ni se me acerquen), me regaló el primer libro mucho antes de que fuera toda la furia que lo fue en poco menos de un año después. Cuando me veían mis compañeros de 10 años, leyendo ¡En Inglés! un libro de ¡¡300!! páginas, me decían que estaba loco. El primer libro lo leí en unos 5 meses. No le metí mucha velocidad. Pero cuando lo terminé, en menos de una semana, me habían regalado ya el segundo, y ese lo leí en 6 días, completito. Lo releí demasiadas veces, hasta que unos 4 o 5 meses después, pude comprarme por Amazon el 3º. Mi primera compra por internet!! Era la primera vez que esperaba con ansia que llegara el 'Correo'... ya para entonces ya comenzaba a usar el mail (pero de mi tío, compartido con mi tía) y nunca antes había mandado cartas fuera. El libro 3 lo leí en 4 días, y, poco antes de nacer mi hermanita, regresó el jefe de mi papá, que sabiendo que ya había leído el 2 y 3 también, y como apenas acababa de ser publicado unas semanas antes, me trajo el 4º libro, que pensé que era un ladrillo al ver su tamaño de más de 700 páginas. Estaba de vacaciones entre 4º y 5º de primaria, así que no tardé más de 4 días en leer ese libro. Y luego, vino la película. Mi papá me llevó, junto con mi hermanito, a ver la primera película el día del estreno, y casi me derrito. En lo que esperábamos que saliera el libro 5, ya en sexto de primaria, nuestro salón, en el Instituto Inglaterra, que estaba antes dividido en "equipos" por colores (Rojo, azul, verde y amarillo), decidimos por unanimidad cambiarlo a "Casas" de Hogwarts. Hicimos los blasones de armas de cada casa, los coloreamos y los pegamos en cada centro de mesa de equipo. Éramos bien ñoños y nos encanta poder presumirlo. Lo seguimos siendo a mucha honra. Al pasar a secundaria, la emoción que teníamos, era que veíamos al enorme Oriente, como una especie de Hogwarts. Los laboratorios de química serían los calabozos de pociones, el Torneo de los 3 Magos serían los Interjesuíticos, tendríamos una biblioteca, y los pasadizos secretos (no-tan-secretos) existían en el auditorio Carrasco, y los salones de pintura y dibujo. Luego, salió la segunda película de Harry Potter. También fui al cine a verla con Alex Reyes, que también estaba conmigo en el Oriente ese año. Pasó todo primero de secundaria, y con ansias durante las vacaciones esperé el libro 5 que saliera, y cuando salió, me lo trajo el nieto del jefe de mi papá, lindo detalle, salvo porque se tuvo que quedar una semana en mi casa, mientras mi papá, el suyo y su abuelo se iban de viaje de negocios a Moroleón, San Luis, León, Torreón, Monterrey y hasta San Antonio Texas. Y llegó y pasó segundo de secundaria, y estábamos en la recta final de segundo de secundaria, cuando, tras morir uno de nuestros profesores, pasó como un mes antes de que saliera la 3ª película de Harry Potter, la cual fuimos a ver en una premiere que organizó el Oriente, solo para los de secundaria (los de prepa tienen/tenían clases en la tarde en ese entonces y hoy.) Tercero de secundaria llegó con todas las novedades y felicidad que me pudo brindar, y con mis primeros interjesuíticos. Pero al terminar 3º, fui de viaje a Disney por los XXV años de casados de mis abuelitos y los XX de mis papás, así que fuimos todos juntos, y el día que salimos de México, el libro de Harry Potter y el Príncipe Mestizo ya estaba en librerías. En el aeropuerto lo compré, y su hermoso olor no lo olvido, mientras hojeaba con ansia el índice y veía las ilustraciones del libro, algo nuevo y que sería la penúltima vez que haría. En las 10 horas que fueron desde que compré el libro, desayunamos Cinnabon Rolls con jugo de naranja, documentamos maletas, subimos al avión, llegamos a Orlando, y llegamos al hotel, ya había llegado al capítulo de "Horcruxes" del libro 6. Ese mismo día lo terminé de leer, y por la noche chateé en el chatroom del hotel con varios que querían saber qué tal estaba el libro. En Noviembre, mientras los de secundaria estaban en interjesuíticos, una mañana fui con Sandy, la hija de Chío Rodríguez, a ver Harry Potter y el Cáliz de Fuego, al cine de Plaza Crystal. Pasó más de un año, y cuando fui a China con mi papá, salió, en los últimos días que estuve allí, Harry Potter and the Deathly Hallows. No me esperé, y lo compré el mismo 21 de Junio de 2007 que salió. Le pusieron al libro una estampita en Chino que dice, literalmente, "Estreno mundial, 21/07/2007". La conservará mientras tenga el libro, no se la pienso borrar. Y terminé de leer Harry Potter, mientras iba en el avión de regreso, de Tokyo-Narita hacia Vancouver, siendo media noche en la parte del mar sobre la cual volábamos, mientras todos los pasajeros traían sus luces apagadas y dormían, y yo tenía la luz encendida sobre mí. Parecía que estaba sentado en medio de la nada, con la oscuridad a mi alrededor, y parecía imaginarme que las escenas del último libro sucedían a mi alrededor, surgiendo de la oscuridad impenetrable (porque me deslumbraba la luz que sólo me daba a mi, en medio de todo el avión que estaba a oscuras). Sobre el Estrecho de Bering leí "The scar had not pained Harry for nineteen years. All was well." y terminé de leerlo. Al regresar de China, fuimos de *vacaciones* (porque lo de China fue de negocios) a Veracruz, y fue cuando salió la película 5. No la fui a ver al cine. Erika me contó que estaba terriblemente mala la película. Y aunque eventualmente la vi, le doy la razón. Pero luego llegó 2009, en medio de mi económica tribulación, y a pesar de ella, pude ir con Dany a ver Harry Potter 6 en los cinemas de Plaza Dorada. En parte también se me hizo que la quisieron hacer en gran parte una película sosa de adolescentes enamorados, y me frustró demasiado que se comieron el funeral de Dumbledore. En Noviembre de 2010 organizamos una ida al parque ecológico con los del Oriente, y solo vino Saúl. Así que nos fuimos juntos a Plaza Dorada a ver Harry Potter y las Reliquias de la Muerte parte 1. Con él mismo, y con César, recién graduado del Oriente, fuimos a ver Harry Potter 7 parte 2. Hoy mismo. En el Triángulo de las Ánimas. Confieso que sí, me hizo llorar la parte de la historia de Snape, pero el sentimiento más cabrón fue ver la escena de "19 Years Later"... en la cual, con la música, y la escena, lo que representa todo en sí, ya no lloré porque me había agotado. Pero con esa escena, se cierra Harry Potter, una importante parte de mi vida que me cautivó desde hace 12 años (Premio de Perseverancia IO... digo... ¡¡Hogwarts!!)

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